NotBornVal

Guerrera cyberpunk con la ficha a medio hacer

Tengo una ficha a medio hacer. Tengo claro que me voy a llamar Valeria, y que mi género va a ser femenino, pero sobre todo lo demás tengo bastantes dudas. No es que sea completamente un lienzo en blanco, pero desde luego tengo muchas alternativas, con eso de que no tengo cargas familiares, ni responsabilidades de ningún tipo.

Pero empecemos por el principio. El entorno es cyberpunk. La gente finge que no, que las débiles democracias son una parte instaurada del sistema mediante el cual el ciudadano tiene el control de lo que ocurre, pero esto no es así, y ni me voy a parar a explicar por qué. Lo único que importa es el dinero, hermana. Con suficiente dinero compras lo que quieras, si existe.

Claro que está ese asunto del calentamiento global, el fin del mundo, las delirantes guerras por los recursos a las puertas de tu casa… pero siguen esa estructura tan absurda, con deserciones por telegram, emisiones de youtube y redes sociales, y consumismo simultáneo, así que en cierto sentido no son más que un setting más del entorno. Y vamos, que si el mundo no dura demasiado tampoco es que vaya a afectarme mucho como personaje, porque tampoco pretendo jugar más que una campaña. No preveo que el máster me lleve por ahí, ni por Burundi, ni cosas así, pero vamos, igual la guerra se planta en mis narices, ¿qué se yo?

Preveo que la campaña se centre más en entornos urbanos, mucho asunto con multinacionales, seguridad informática, espionaje, hackeos, el alba de la inteligencia artificial, y ese tipo de cosas, pero tengo cierta libertad, en realidad, para realizar otras cosas: perfectamente podría desplazarlo todo a un entorno rural que más o menos coexiste con este enorme delirio absurdo, o combinar ambas opciones.

Voy con mi personaje en sí mismo. Aunque tengo cuarenta años, realmente empiezo en muchos sentidos “de cero”. Para empezar mi familia está muerta o me desprecia, y no tengo pareja ni un interés particular en tenerla. Todo mi asunto del cambio de género, de nombre y de identidad ayudan mucho a este “restart”, y aunque tengo que vender la vivienda de mi madre (y eso es triste) me reportará ingresos que me pueden dar el comienzo que quiera (o pueda) comprar.

Arrastro algunas cosas de mi vida anterior, pero en conjunto no es que sean necesariamente malas. Tengo buena salud, puedo correr una maratón, bucear cincuenta metros, levantar un buen peso y tengo experiencia combatiendo con espada larga. Ninguna de estas cosas guarda relación con mi oficio: la tecnología. Puedo adaptarme fácilmente a cualquier aspecto de la misma con no demasiado esfuerzo.

Claro que tengo algunas limitaciones. Me vienen a la mente las siguientes.

Nada de historias de amor, defender causas nobles o luchar contra el sistema. Tuve demasiado de todo esto en mi anterior personaje, y me resultan tramas muy frustrantes porque aunque tengan un gran desarrollo, al final tienes muy poca capacidad para conseguir algo.

Hay profesiones que no quiero aprender. Aunque me puedo adaptar a cualquier entorno tecnológico (y normalmente esto es más que suficiente), no pretendo a estas alturas cantar o tocar la guitarra. Estoy abierta a aprender, pero no a dejarme los cuernos con una habilidad que a priori se me da mal.

No me gustaría que tuviera mucho viaje. O sea, si hay que viajar como un método necesario para una aventura concreta, está bien, pero no pretendo conducir un camión durante años. De nuevo, ya tuve más kilómetros de los que querría en mi anterior personaje.

No sé a cuanto de lo que hago ahora mismo quiero renunciar. Por ejemplo, me gusta todo lo que hago de warhammer, pero si obtengo algo muy impresionante a cambio, estaría dispuesta (con pena) a dejarlo atrás. No ocurre lo mismo con la práctica de la espada larga, que es de lo poco que me inspira ahora mismo.

Y en principio creo que esto es todo. La parte buena de este proceso es que no tengo que acometerlo ahora mismo, ni de un solo golpe, pero tampoco creo que deba dormirme en los laureles, porque el máster me da mala espina, y si no le doy yo mascadito lo que quiero, seguro que me pone una mierda de aventuras y acabo por odiar mi personaje.

Vamos, que estoy abierta a sugerencias. Tengo algo de dinero, varias espadas, talento, un todo terreno y una peluca, y sé cómo utilizar todo ello. Siento que no logro formar el puzzle, o que me falta alguna pieza, o ver el dibujo global.